«Lo importante no es saber lo que hay que hacer,
sino ser capaz de hacerlo»

Roberto Aguado

tenemos unos 60.000 pensamientos al día 

el 95% son subconscientes

el 80% de ellos negativos

el 93% jamás llegará a materializarse

Tu parte consciente, el 5% de lo que haces, dices y piensas, tiene claro lo que quiere hacer… pero está en clara desventaja frente al 95% de la parte subconsciente, que tiene sus propios planes y boicotea tus intentos de cambio.

Por eso es tan complicado lograr los cambios que quieres hacer. Somos mucho menos racionales de lo que creemos.

“La emoción decide y la razón justifica”
Roberto Aguado

“La vida nos habla en susurros

Si no podemos escuchar nos habla más alto.

Si aún no podemos o sabemos entender o no queremos escuchar, nos sigue hablando más y más alto hasta que nos da un grito.

Ese grito es el dolor, la enfermedad o el accidente.”

La Medicina del Alma
Eric Rolf

Nuestro cerebro está programado para asegurarnos la supervivencia, no la felicidad.

Por eso oscila constantemente entre el pasado y el futuro:

  • En el pasado busca entre las experiencias
  • En el futuro explora las posibilidades para crear su mejor estrategia de supervivencia

Hablando desde la cabeza resulta complicado deshacer los bloqueos, porque son mayoritariamente subconscientes.

Y en medio de esa constante oscilación está nuestro cuerpo, que almacena toda la información de nuestras vivencias, tanto conscientes como subconscientes.

El cuerpo es presente.

“La puerta del cambio está en el presente,
a través del cuerpo y el movimiento consciente”

“El cuerpo es un ser políglota. Habla a través de su color, temperatura, el rubor del reconocimiento, el resplandor del amor, las cenizas del dolor, el calor de la excitación, la frialdad de la falta de convencimiento…

Habla a través del salto de un corazón, la caída del ánimo, el hoyo en el estómago y la esperanza que asciende.”

Clarissa Pinkola Estés

La Neurociencia demostró que todo recuerdo emocional va siempre acompañado de una expresión somática (gesto de miedo, ira…) y de un movimiento (apartarme, cerrar el puño…).

Y viceversa también es cierto; todo movimiento va siempre de la mano de una expresión somática y un recuerdo emocional.

Por lo tanto, podemos aprovechar esta bidireccionalidad y lograr que a través del movimiento consciente, el cuerpo libere bloqueos emocionales y subconscientes.

                                                                     «… la musculatura no sólo tiene la dimensión del movimiento.
La musculatura tiene la dimensión de cambiar procesos mentales»
Dr. Mario Alonso Puig

«El cuerpo es el inconsciente»
Candace Pert